Las universidades públicas de Andalucía impartirán 22 nuevos títulos internacionales a partir del curso 2025/2026.
Las universidades andaluzas impartirán, a partir del curso 2025/2026, un total de 22 nuevas titulaciones de carácter internacional, recogidas en la programación académica aprobada por la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación. Así lo ha puesto de relieve el consejero José Carlos Gómez Villamandos en una comparecencia en comisión parlamentaria, donde ha remarcado que la proyección exterior del sistema público universitario es una prioridad para el Ejecutivo autonómico, dado que contribuye a reforzar la competitividad y la excelencia de la educación superior andaluza.
22 enseñanzas
Según ha aclarado en su intervención, esas 22 enseñanzas se concretan en:
- 1 Grado.
- 17 Másteres.
- 4 Doctorados.
- De las que una tiene la condición de formación dual, de forma que combinará la cualificación en las aulas y la especialización el ámbito empresarial.
Universidades
Todas ellas se implantarán en seis instituciones académicas: las universidades de Cádiz (UCA), Granada (UGR), Huelva (UHU), Jaén (UJA), Málaga (UMA) y Sevilla (US). Asimismo, ha informado que, de ese cómputo general, 15 titulaciones (un grado, once másteres y tres doctorados) se desarrollarán en el marco de las Alianzas Universitarias Europeas, en las que están integradas la UCA, la UGR y la US.
Gómez Villamandos ha destacado que el sistema público universitario, en su apuesta por la internacionalización, ha incrementado su participación en esos consorcios de educación superior, integrándose ya los campus de Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla en ocho de ellos. «Las instituciones académicas de la comunidad coordinan, además, cinco, consolidando a Andalucía como la primera comunidad a nivel nacional al frente de este tipo de redes estratégicas universitarias», ha apuntado el consejero.
Por otro lado, ha explicado que su departamento prepara una nueva normativa que dará prioridad a la implantación de aquellos títulos que inicialmente no hayan sido incorporados a la programación académica, pero que se pondrán en marcha en el marco de las relaciones de las universidades andaluzas con otras instituciones internacionales. La nueva orden permitirá que esas formaciones universitarias puedan ser autorizadas e incorporadas a los catálogos de los campus sin someterse a los plazos generales fijados para las de carácter autonómico, aunque para ello deberán estar avaladas por una agencia de evaluación inscrita en el Registro Europeo de Agencias de Aseguramiento de la Calidad en la Educación Superior (EQAR).
Acreditación lingüística para estudiantes de bajos recursos
Por otro lado, el consejero de Universidad ha remarcado que la LUPA contempla la concesión de becas dirigidas a aquellos estudiantes de universidades públicas con una renta familiar baja o con dificultades económicas para asegurar el acceso a estudios de idiomas, permitiendo que estos alumnos logren la acreditación lingüística del B1. Gómez Villamandos ha aclarado que «el Gobierno andaluz continuará apoyando económicamente también la certificación de nivel B2, un requisito contemplado en la LUPA».
Por otro lado, ha explicado que, en una acción conjunta con la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, se ha desarrollado un acuerdo entre las Escuelas Oficiales de Idiomas e institutos públicos para que oferten, durante primero y segundo de Bachillerato, la materia optativa ‘Pruebas de certificación de idiomas’, con el objetivo de que los jóvenes puedan obtener de forma gratuita el certificado de nivel intermedio B2 en inglés, francés o alemán. Un total de 93 institutos públicos andaluces bilingües o plurilingües han ofertado la asignatura durante este curso, de la que se han beneficiado más de 3.000 estudiantes, lo que significa que concluirán esa etapa educativa con el nivel de idiomas que se le exigirá, a partir de 2029, en la futura ley universitaria para la obtención de títulos universitarios oficiales. «El aumento del nivel de acreditación lingüística que estipula el nuevo marco enriquece y mejora la formación de los estudiantes, pues el dominio, como mínimo, de una segunda lengua, es un requisito cada vez más demandado en el mercado laboral», ha indicado. Para el consejero, esta medida es un importante paso en la igualdad de oportunidades, ya que, hasta ahora, al exigirse el nivel B1, «muchos estudiantes acreditaban ese nivel y no seguían estudiando para alcanzar el B2, porque económicamente no se lo podían permitir. Ahora se garantiza a todo alumno que quiera obtener un título universitario que cuente ya con un B2», ha aseverado.