Ley de protección animal: Cuánto tiempo se pueden quedar solos perros y gatos; y otras prohibiciones

La Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales incluye una serie de prohibiciones respecto a perros y gatos, y animales de compañía en general.

En España en uno de cada tres hogares se convive con al menos un animal de compañía, y así, según la información resultante de los registros de animales de compañía de las comunidades autónomas, en la actualidad hay más de 13 millones de animales de compañía registrados e identificados.

El principal objetivo de esta ley no es tanto el garantizar el bienestar de los animales evaluando las condiciones que se les ofrecen, sino el regular el reconocimiento y la protección de la dignidad de los animales por parte de la sociedad. Para ello, implementa mecanismos legales que permitan el fomento de la protección animal y prevenir el alto grado de abandono de animales.

¿Cuánto tiempo se puede dejar solo en casa a un perro o a un gato?

Esta es una de las principales dudas que pueden surgir. Todos los miembros de la familia se deben ausentar y el animal de compañía queda solo en casa, ¿cuál sería el tiempo máximo que se puede mantener esa situación?

La Ley lo deja claro, pues:

    • prohíbe dejar sin supervisión a cualquier animal de compañía durante más de 3 días consecutivos;
    • en el caso de los perros, este plazo no podrá ser superior a 24 horas consecutivas.

Otras prohibiciones, respecto a los animales de compañía

Además de la anterior, hay otras prohibiciones específicas respecto de los animales de compañía; veamos cuáles son:

  • Su sacrificio, salvo por motivos de seguridad de las personas o animales o de existencia de riesgo para la salud pública debidamente justificado por la autoridad competente.
  • Practicarles todo tipo de mutilación o modificaciones corporales permanentes; se exceptúan de esta prohibición los sistemas de identificación mediante marcaje en la oreja de gatos comunitarios y las precisas por necesidad terapéutica para garantizar su salud o para limitar o anular su capacidad reproductiva.
  • Utilizarlos en peleas o su adiestramiento en el desarrollo de esta práctica u otras similares, así como instigar la agresión a otros animales de compañía o personas fuera del ámbito de actividades regladas.
  • Mantenerlos atados o deambulando por espacios públicos sin la supervisión presencial por parte de la persona responsable de su cuidado y comportamiento.
  • Mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, azoteas, trasteros, sótanos, patios y similares o vehículos.
  • Llevar animales atados a vehículos a motor en marcha.
  • La puesta en libertad o introducción en el medio natural de animales de cualquier especie de animal de compañía que se desarrolla en la presente ley salvo los incluidos en programas de reintroducción.
  • La eliminación de cadáveres de animales de compañía sin comprobar su identificación, cuando ésta sea obligatoria.
  • Llevar a cabo actuaciones o prácticas de selección genética que conlleven problemas o alteraciones graves en la salud del animal.
  • La cría comercial de cualquier especie de animal de compañía, así como cualquier tipo de cría de animales cuya identificación individual sea obligatoria por la normativa vigente, por criadores no inscritos en el Registro de Criadores de Animales de Compañía.
  • La comercialización de perros, gatos y hurones en tiendas de animales, así como su exhibición y exposición al público con fines comerciales. Perros, gatos y hurones solo podrán venderse desde criadores registrados.
  • La comercialización, donación o entrega en adopción de animales no identificados y registrados previamente a nombre del transmitente conforme a los métodos de identificación aplicables según la normativa vigente.
  • Emplear animales de compañía para el consumo humano.
  • Se prohíbe el uso de cualquier herramienta de manejo que pueda causar lesiones al animal, en particular collares eléctricos, de impulsos, de castigo o de ahogo.

La Ley quiere recalcar que, la tenencia de animales de compañía debe llevar aparejada una  responsabilidad a la altura del cuidado que se debe dar a un ser diferente a una cosa; por lo que la tenencia de animales de compañía debe suponer un compromiso con su cuidado en el transcurso del tiempo, su identificación y con su integración en el entorno.

¿Cuándo entra en vigor la Ley de protección animal?

La ley entrará en vigor a los seis meses de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado (BOE)»; a partir del 29 de septiembre de 2023.